Contracultura parte I

Uno de los libros que más han marcado mi vida, hasta ahora, es aquel libro de Joseph Heath y Andrew Potter: Revelarse vende. Lo que primero llamó mi atención fue la contraportada donde propone la escandalosa idea de que “la contracultura ha sustituido casi completamente al socialismo como base del pensamiento político radical”. Y no pude resistirme a hojearlo y a identificar con plenitud cada uno de los ejemplos que escriben.
El libro empieza tratando de dilucidar quién mató a Kurt Cobain. Como todo mundo sabe, el vocalista de Nirvana murió el 8 de abril de 1994 debido a una sobredosis de heroína. Bueno, no sé si todo mundo lo sabe, pero al menos es un dato muy relevante para los fanáticos de la música alternativa. A muchos, tal vez, les pasó el 94 sin pena ni gloria; a lo mejor a muchos no nos importaba realmente que Rolling Stone le hubiera dado una portada y Kurt Cobain, rebelde que era, posara para la foto con una camiseta que decía “Las revistas de música convencional no molan”, bueno, debía decirlo en inglés, pero la traducción española nos arroja semejante frase. Al único que le importaba haber salido en la revista era a Kurt Cobain que quería ser acá bien desmadroso, cero convencional, inadaptado, revolucionario, cool, alternativo y todas esas mamadas que en alguna etapa de nuestras vidas nos da por creer, querer ser o, peor aún, hacer. Decía, al único que le importaba haber sucumbido al sistema, haberse traicionado de tal modo al aparecer en la revista era al mismísimo Kurt Cobain, porque su música no podía ser popular, no debía ser el hit del momento y le parecía de mal gusto que cualquier pakistaní pudiera tararear “a mulato, an albino, a mosquito, my libido”, o sea, él estaba convencido que una vez que te volvías IN, habías perdido la esencia misma de lo groovy.
Joseph Heath y Andrew Potter contestan la pregunta: ¿Quién mató a Kurt Cobain?: Se mató él mismo. “A Kurt Cobain lo mató Kurt Cobain. Pero el cantante también fue víctima de una idea falsa: la contracultura. Aunque se consideraba un músico punk, un rockero dedicado a hacer música 'alternativa', había vendido millones de discos. En gran parte fue él quien propició que la música antes denominada 'rock duro' se bautizara como 'grunge', una etiqueta mucho más comercial. Pero en vez de sentirse orgulloso, esta popularidad siempre le pareció algo de lo que avergonzarse”. En este punto de la lectura dije “hum”. ¿Por qué alguien que hace lo que le gusta, le viene en gana y además se forra de dinero con eso se siente avergonzado? No pude dejar de sentir algo en mi corazoncito, porque suicidarse por no poder lidiar con el hecho de que ya no eres rebelde sin causa sino parte del sistema porque vendes millones de discos, tienes millones de fans y te dan portadas en casi todas las revistas fresoides, siempre puede parecer glorioso, pero al mismo tiempo, parece la cosa más tierna, estúpida e inútil del planeta.
¿Y cuándo se supone que uno es contracultural?
Tal vez convenga hacer un test de Sí o No.

1. ¿Piensa usted votar por Patricia Mercado porque es la más incluyente, porque ya hay que darle chance a las mujeres, porque es la única con propuestas diferentes y tiene ganas de unir a las minorías?
2. ¿Es usted vegetariano?
3. ¿Trata de apoyar al mercado local comprando naranjas de Montemorelos EXCLUSIVAMENTE?
4. ¿Piensa usted que Mc Donald's es el opio de todos los pueblos?
5. ¿Cree que vestir huaraches, ropa jipiosa y un look oaxaqueño es “auténtico"?
6. ¿Casi no ve televisión y aún así está contra la Ley Televisa?
7. ¿Considera que el budismo, el tai chi o los ácidos son más espirituales que el catolicismo?
8. ¿Cada vez que RBD, Yair y Erasmo Catarino suenan en su radio, usted lo apaga inmediatamente e inserta el CD de algún grupo inglés poco conocido, underground pero buenísimo?
9. ¿Es usted zapatista y está absolutamente en contra del CENEVAL porque es una clara intención del gobierno por unificar la educación, volviéndola más represora y adoctrinante?
10. ¿Rechaza cualquier diálogo con instancias gubernamentales porque no cumplirán por completo con su pliego petitorio y así usted no juega?
11. ¿Es usted macrobiótico y su ideal de vivienda es una comuna?
12. ¿No come pollo Bachoco porque está estresado (usted y el pollo)?
13. ¿Piensa que el maíz azul es más maíz que el amarillo?
14. ¿Toma Boing porque así ayuda a la economía nacional y evita que The Coca Cola Company deje de evitar que el empleo crezca en los países subdesarrollados?
15. ¿Está en contra de la producción industrial en serie?
16. ¿Vivir en el centro de la ciudad en una casona vieja es el lugar ideal para usted?
17. ¿Considera que cualquier reforma y aplicación de reglamento por parte de instancias del gobierno son represivas y antifuncionales?
18. ¿Prefiere Suburbia al Palacio de Hierro porque es la misma ropa pero más barata?
19. ¿Renunciar al trabajo, perseguir su sueño y vivir sin ataduras es la mejor manera, para usted, de librarse del mundo tipo Gutierritos en el que nos hemos sumido?
20. ¿Su peor miedo es que 1984 de George Orwell sea ya un hecho consumado?
21. ¿Cree que el capitalismo es incapaz de satisfacer las necesidades profundas del ser humano?
22. ¿Está convencido (a) que el destrampe sexual, probar nuevas experiencias y cogerse a media humanidad es lo de hoy?
23. ¿Pondría las manos al fuego al asegurar que “no es que haya más libertad de expresión”, sino que “el sistema es así o más represor al demostrarnos la maestría con la cual absorbe cualquier rebeldía”?

Si ha contestado SÍ a la mayoría de estas preguntas, Felicidades, es usted todo un contracultural, puede afiliarse al EZLN, hacer quince mil juntas inútiles, preguntarle a todo mundo sus ideas para cambiar al mundo, recolectar un millón cuatrocientas treinta y cinco propuestas y amenazar con bombas molotov si es que al gobierno se le ocurre aceptar únicamente un millón cuatrocientas treinta y cuatro. Pinche represor fascista que nos empuja a la rebelión. (En otras palabras, puede usted irse al bando de Magneto, en X MEN).

Si ha contestado usted la misma cantidad de Sí que de No. Felicidades, es usted un perfecto ciudadano de este mundo inmundo, tan común y corriente como cualquier otro que bien podría formar una escuelita de mutantes para adaptarse felizmente al sistema.

Si ha contestado a la mayoría de las preguntas con NO. Felicidades, puede considerarse un derechista de mierda, conservador, mocho, arrogante como cualquier chico Tec, líder del mañana y emprendedor de su propio negocio porque prefiere trabajar quince horas para sí mismo que ocho para otros. No lo culpo, así somos todos. Si yo estuviera hecha de fierros y mi única gracia fuera sacar unos cuchillos enormes cuando me enojo, también me formaría en la fila para que me curaran mi mutantez.