Mucho y poco que decir

Criseida se siente quién sabe cómo se siente. Se siente como que bajó al infierno de Dante y vio lo que tenía que ver y regresó y ahora solo está enfrente de la computadora sin saber muy bien cómo se siente ni a quien recurrir porque sabe que las promesas son las promesas y a veces esas promesas se hacen muy a fuerza o muy a lo pendejo y a la pendeja y en el fondo uno, otro, todos, no tenemos ni tiempo ni cabeza ni agallas para cumplir con nuestras promesas y entonces Criseida recuerda, porque Criseida lo recuerda todo, Criseida recuerda que alguien le leyó el tarot poco antes de Spring Break, y recuerda porque siempre recuerda, recuerda que le dijeron que en este viaje ella, Criseida, crecería, y Criseida lo creyó porque Criseida siempre cree todo y entonces hoy domingo 26 de abril Criseida siente como si le estuvieran estirando los huesos para que creciera y siente que le duele muchísimo y siente que no hay pain killer que le pare el dolor.

Y Criseida ya se recetó de todo. Ya se recetó alcohol. Ya se recetó salir a pasear con los amigos. Ya se recetó más alcohol. Ya se recetó sentarse a leer. Ya se recetó ponerse a trabajar. Ya se recetó las 15 canciones de su playlist etiquetadas bajo el tag de SOLO EN CASOS DE EMERGENCIA.

Pero Criseida siente que no hay Facebook, ni Youtube, ni messenger que la consuele. Criseida siente....

Criseida siente que justo en este momento Criseida ya no es Criseida pero más tarde eventualmente será Criseida. Y entonces recuperará los vidrios de ese corazón suyo que estalló. Y entonces dejará de oir todos los días Dancing Queen.

Y luego Criseida siente que tampoco lo que siente viene mucho al caso, total, en quince días se va pa México y tal vez nunca regrese, o tal vez no la dejen regresar.

Pero mientras tanto Criseida se venda los huesos y trata de no sentir...