Estoy ensayando el tema de YO CONFIESO. Les confieso que es porque estoy escribiendo un texto con este novedoso tópico. Es chistoso que me haya tocado este tema porque es algo que me encanta explorar: decir mis más sórdidos secretos. No obstante, creo que no hay muchas novedades en mi interior.
Lo único que tengo que confesar en estos días es que:
1. Estoy leyendo el libro del Peje, La mafia que se apoderó de México... y el 2012.
2. Vi una película argentina que me gustó mucho y se llama Un novio para mi mujer.
3. He estado con el birrete ladeado pero hoy amanecí con un extraño buen humor.
4. Estaba esperando con urgencia el día de hoy porque según se iba a poner el mercadito y resulta que vinieron si acaso dos puestos. (Quería comprar tamales).
5. Estoy viendo Fray Don Juan con Mauricio Garcés.
6. Acabo de terminar Babel de Iñárritu y... bueno, la vi sin subtítulos así que me aburrí mucho.
7. Estoy experimentando una emoción muy extraña: Más bien, la situación fue extraña. Me encontraba yo online y una amiga de esas que una conoce en la vida me habló porque quería que le echara una manita en algo bastante peculiar: quería hablar de sexo o... bueno, no sé, tal vez quería cibersexo. Yo, en realidad, no soy mucho de rechazar conversaciones aunque éstas giren entorno a bochornosos derroteros pero en ese momento no contaba con la suficiente disponibilidad y le dije que platicábamos luego... Mala idea, la chica se enojó, pataleó y hasta me borró del facebook. La cosa me dejó pensando y me puse a analizar en qué parte de la amistad viene una cláusula en donde UNA tenga por obligación estar 24/7 para atender las necesidades virtuales de otra persona. Entiendo que pudo haberse sentido incómoda y expuesta y mi falta de tiempo la hizo sentirse vulnerable pero BORRARME DEL FACEBOOK?!?!?!?!?! Luego que me sorprendí ofendida porque ella estaba ofendida y ofendida yo doblemente porque me borró del FB me dio risa: A mí me ofende más que me borren del facebook a que no me pelen en el chat. Qué raras son las prioridades VIRTUALES de la gente.
En fin, seguiré pensando más acerca de mis confesiones.
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